28/11/2025
Los estudiantes de Prekínder del Colegio Diego de Almagro de Los Vilos visitaron el Centro Andrónico Luksic Abaroa (CALA) y el Humedal Laguna Conchalí como parte de una actividad diseñada para que conocieran su propio territorio, aprendieran sobre la naturaleza local y entendieran de forma simple cómo se trabaja el cobre en la zona.
Según la educadora de párvulo, Texia Godoy, la visita buscó que los niños “pudieran conocer este lugar, valorar la Laguna Conchalí, la flora y fauna, y entender que debemos cuidarla. Muchos viven en Los Vilos pero nunca habían bajado realmente al humedal”.
La jornada comenzó en la Línea del Tiempo, donde los pequeños aprendieron, de forma adaptada y lúdica, que el cobre ha sido parte de la vida de las personas desde tiempos antiguos. Observaron herramientas antiguas, objetos de cobre y conocieron cómo este mineral está presente en su vida diaria. Este recorrido permitió que comprendieran, a nivel inicial, “de dónde sale el cobre y para qué sirve”,como explicó la profesora.
Luego ingresaron a la Sala Circular, donde a través de imágenes, sonidos y juegos interactivos aprendieron sobre el proceso de recirculación del agua, los animales del sector y la importancia de cuidar la naturaleza. En este espacio los estudiantes pudieron hacer preguntas, observar las pantallas y sus videos, conectando el contenido con su curiosidad natural.
La visita culminó con la Ruta del Patrimonio y la Biodiversidad, un recorrido al aire libre por el sendero interpretativo del Santuario de la Naturaleza y Sitio Ramsar Humedal Laguna Conchalí , donde quedó claro que los animales fueron los protagonistas para ellos. Observaron aves, mariposas, plantas y pequeños insectos, relacionando su aprendizaje con la importancia por el entorno: “Me gustaron los patitos… la pasé muy bien”, comentó Florencia Rojo, mientras que su compañera Harley Montes agregó: “Me gustaron las mariposas… Me gustó observar el humedal”.

Además, los niños pudieron identificar flores, escuchar aves, sentir el viento y vivir el entorno natural de manera directa. Según la profesora Texia, esta experiencia tuvo también un fuerte componente socioemocional: “El lugar es tranquilo y los relaja. Tengo estudiantes muy activos y acá se sintieron tranquilos, caminaron bien y disfrutaron mucho. Fue muy beneficioso para ellos”.
La experiencia permitió que los niños desarrollaran vínculos, exploraran su territorio y vivieran un aprendizaje significativo fuera de la sala de clases, fortaleciendo el cuidado por la naturaleza desde su primera infancia. Para más información sobre el CALA, pueden contactarnos a través de nuestro WhatsApp +56971755348 o seguirnos en Instagram @centrocala. También pueden visitarnos en nuestro fan page de Facebook Centro Andrónico Luksic Abaroa y en nuestro sitio web www.centrocala.cl.